Nuestro establecimiento realizó una jornada de reflexión pedagógica sobre integridad, desarrollando su significado y cómo aplicarlo a la vida escolar. Ejerciéndola como principio moral y como una práctica cotidiana.
La integridad se define como la cualidad de actuar con honestidad, responsabilidad y coherencia entre lo que se piensa, se dice y se hace. Nos ayuda a ser personas justas, a respetar las normas, colaborar con los pares, cuidar los espacios comunes, cumplir con deberes y compromisos. A través del cuento “La Sorpresa”, escrito por Elisa Zulueta, los cursos trabajaron en una actividad reflexiva y de opinión, analizando distintos escenarios en cómo sería el correcto actuar.